Recuerdo que vivías en una hermosa colina, rodeada de cocotero, en un ambiente de ensueños y una naturaleza pura, aire puro se respira allí cargado de olores frescos, acompañado del cantar de una cascada, que servía de fondo a las dulces melodías de los pajaros: Así te recuerdo niña
Te recuerdo niña de campo, corriendo entre flores silvestres, persiguiendo mariposas, soñando
bajo el susurro del riachuelo, te recuerdo despreocupada recogiendo frutas, mangos, guayabas, con tu largo pelo negro impregnado de olor a hierba, y rocío.
Te recuerdo descubriñando los diferentes tejidos de las telas de arañas en los campos,
corretiando una gallina, para agarrarle los polluelos.
sonriendo, siempre sonriendo, siempre alegre, con una alegría que llena la vida, y el alma misma.
Te recuerdo niña.
3 comentarios:
Bonitos recuerdos para atesorar...
Salud y besitos
En verdad que has regresado con fuerza, escribes muy bonito y con mucho sentimiento, hago este comentario por el presente y los anteriores escritos, la foto de los gorriones me encanto. Salud y buen dia!
Neste relato literário, revejo muitas das viagens que realizo a bordo da minha autocaravana.
O apreciar da natureza, o saborear uma madrugada com o cantar dos pardais e dos melros, o sentir a frescura de um ribeiro ainda selvagem no meio do monte.
São momentos assim que me fascinam e me atraem no Autocaravanismo, o estar em Comunhão com a Natureza.
Parabéns pelas belas linhas escritias e sentidas.
Um abraço e até sempre,
José Gonçalves
(Guimarães)
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